Como si de un sueƱo se tratase; una noche entera de surrealismo a raudales y situaciones a cada cual mĆ”s absurdas bajo un torrente de alcohol y una plĆ©tora de coloridos personajes entre los que serĆ­a complicado juzgar cuĆ”l estĆ” peor de lo suyo. Una noche que a diferencia de lo sugerido por el tĆ­tulo, parece extraordinariamente larga a juzgar por la interminable sucesiĆ³n de eventos que dejarĆ­a en paƱales algunas de las mĆ”s salvajes juergas universitarias que podamos aƱorar o (no) recordar.

La pelĆ­cula, recientemente galardonada por los Premios de la Academia Japonesa como animaciĆ³n del aƱo gracias a la brillante direcciĆ³n del incombustible Masaaki Yuasa, estĆ” basada en la novela homĆ³nima del escritor Tomohiko Morimi, en la cual regresan algunos personajes que ya hicieron acto de presencia en su anterior trabajo, The Tatami Galaxy (tambiĆ©n fue adaptado por Yuasa en un anime de 11 episodios), aunque las historias no estĆ”n relacionadas mĆ”s allĆ” de compartir Kyoto como telĆ³n de fondo.

Este largo paseo en montaƱa rusa es un viaje que empieza en medio de la escena nocturna de Ponto-chō, burbujeante y emblemĆ”tico distrito de Kyoto, especialmente entre aquellos a quienes les va la marcha. El itinerario incluye una boda, una danza de sofistas, una competiciĆ³n para ver quiĆ©n bebe mĆ”s, una feria nocturna de libros, un grupo de teatro de guerrilla, entre otras cosas. Nuestra heroĆ­na, a quien sĆ³lo conoceremos como la chica de pelo negro y la Ćŗnica que parece medio normal de toda la galerĆ­a, sale dispuesta a darlo todo. Tras sus pasos va su Sempai, locamente enamorado de ella y con un supuestamente (in)falible plan marca Acme: urdir una serie de encuentros simuladamente casuales con el objetivo de hacerle creer a la inocente joven que estĆ”n unidos por el destino. Huelga decir que no estarĆ­amos hablando de una comedia si no se tratase de un plan que en lugar de haber salido con buena estrella, naciĆ³ estrellado y carente de ciertas piezas de indumentaria.





El banquete estĆ” servido. En sentido figurado y literal: la puesta en escena es un festĆ­n para los sentidos. La inusual animaciĆ³n que ya lleva el sello de Yuasa, sigue aportando originalidad y frescura aunque ya estemos acostumbrados a su estilo, el cual es particularmente apropiado dada la naturaleza onĆ­rica y arbitraria de los eventos de la historia, con una fuerte carga simbĆ³lica acerca del paso del tiempo, la nostalgia, el amor y las relaciones personales. Relojes que avanzan a distintas velocidades. Una carpa de feria disuelta entre pĆ”jaros. La detenciĆ³n de actores renegados. Un sukiyaki (plato tĆ­pico de cocina japonesa) al final de las escaleras de un edificio. Una meticulosa organizaciĆ³n dedicada al espionaje de estudiantes. Un musical improvisado y una inesperada confesiĆ³n de amor son las guindas del pastel gracias a la mĆ”gica banda sonora de Michiru Oshima. 

Nada tiene sentido en este vodevil donde sĆ³lo logramos encontrar la consistencia del  conjunto a travĆ©s de la locura colectiva. The night is short, walk on girl campa a sus anchas sin necesidad de compartir espacio con nada que le pueda hacer sombra en un lugar intermedio entre la comedia romĆ”ntica y el viaje Ć”cido.

Ficha TĆ©cnica


Nombre Original: Yoru wa Mijikashi Aruke yo Otome 

Director: Masaaki Yuasa

Estudio: Science Saru

AƱo: 2017

GƩnero: Comedia romƔntica

CategorĆ­a: Josei