Fulanito:- Wala, venís del del Salón comiquero. ¿Qué tal está?
Menganito- Es la caña. Presentan el videojuego Metal Gear 23 y han invitado al desarrollador
Sotanito- Genial. He podido comprar una camiseta exclusiva de mi serie y varios muñecos que me faltaban de colección.

Fulanito- Vale. ¿Y qué cómics habéis pillado? ¿Quién firmaba?


Oigase el cri, cri, cri...


Desgraciadamente esta conversación es de lo más normal; se va a un Salón mal-llamado de cómic/manga a lucir cosplays, ver novedades de videojuegos, disfrutar de la música y adquirir todo tipo de merchandising.
¿Y el cómic/manga del evento, dónde queda?

Antiguamente, este tipo de salones, servían para encontrar rarezas comiqueras, cómics difíciles de encontrar o simplemente buenos precios; si además estaba el autor, el orgasmo era máximo y múltiple... Sólo te los firmaban con su rúbrica, es decir, que hoy en día deberíamos darnos con un canto en los dientes por conseguir un dibujo suyo.
¿Y qué ha pasado por el camino?
Las nuevas tecnologías han acercado al lector al lado oscuro y lo más chirriante de preguntarles sobre cómic en los eventos es que la mayoría se los descargan/leen por internet.

¿Y por qué?
Por que les parece caro pagar entre 7-8 euros que vale un manga a los 15-25 que puede costar un cómic... Para leerlo una vez. Un videojuego que se acerca a los 70 euros y se quedará obsoleto en breve, no es caro.
Con ese argumento, nada más que añadir.
Volvemos a aquello de "no tengo dinero para apostar por tu fanzine y ayudarte con 3 euros, pero he hecho cola por la Play 4 que me costará unos 500 euros"
Somos un país hipócrita y con cada vez menos cultura y ojo, no quiero decir que los videojuegos y demás no sean cultura, simplemente que no tienen que ver con un Salón dedicado al cómic. Si hablamos de un evento general, dedicado a la cultura como podría ser una Japan Weekend o un ExpOtaku, vale. pero no llamemos Salón del cómic/manga a un evento donde lo menos importante (desgraciadamente) es lo que aparece en el título.

El cosplay ha ganado terreno y me parece fantástico, pero la gente va a lucirse y a encontrar más gente que comparta sus gustos ( y luego están los que simplemente van a enseñar carne, pero eso es harina de otro costal, los hay que van a tomarse algo dentro (un sitio para quedar como otro)...

Que está muy bien que todos quieran tajada de pastel: videojuegos, camisetas, películas, pendientes, muñecos, chapitas... Pero señoras y señores, hablamos de cómic y quizás lo que menos importe sea eso. Las mejores entrevistas en un salón, las he hecho paseando, no en el stand; con Kenny Ruiz quedamos para charlar, a Alfonso Azpiri me lo he encontrado tranquilamente mirando en los stands editoriales, José >Fonollosa sale y entra para fumarse el piti y la gente anda preocupada por si se ve o no carne suficiente.
Tal vez mi visión de un salón sea distinta, tal vez los años me hayan hecho mella... Pero tras ver salones dedicados al cómic y sólo al cómic fuera de nuestras fronteras, da que pensar.