Cuando Warren Ellis creĆ³ a Midnighter, muchos quisieron ver a un alter ego de Batman y hasta a su relaciĆ³n con Apolo le encontraron similitudes con el hombre murciĆ©lago y su cacareado amor/odio con Superman. Sin embargo, el ir siempre con su traje de hĆ©roe (menos en la obra que nos ocupa, que aparece varias veces sin Ć©l) y la mĆ”scara, lo acerca a alguien mĆ”s oscuro, tal vez la Sombra, aunque con su fĆ­sico y su fuerza, serĆ­a equiparable al CapitĆ”n AmĆ©rica.

Pero dejemos las comparaciones y sumerjĆ”monos en el hĆ©roe que rompe estereotipos. Tras su reconciliaciĆ³n, Midnighter y Apolo van a pasar la prueba de fuego (nunca mejor dicho). Henry Bendix, creador del primero, quiere destruirlo y para ello arrastra a Apolo al inframundo. NerĆ³n ha robado su alma y el hĆ©roe deberĆ” descender para rescatar a su pareja.

Steve Orlando es el prolĆ­fico guionista que ha juntado a los dos superhĆ©roes en un mismo cĆ³mic; con anterioridad, Apolo apareciĆ³ esporĆ”dicamente en Midnighter pero es en el arco Rebirth donde toma notoriedad la relaciĆ³n, convirtiĆ©ndose en el nĆŗcleo de la historia.

El dibujante Fernando Blanco destaca, como Ć©l mismo cuenta en la entrevista al principio del tomo, por su dinamismo narrativo en las secuencias de acciĆ³n y sus composiciones de pĆ”gina. Con un dibujo muy versĆ”til y splash pages de infarto, la acciĆ³n no parece tener secretos para su arte, no necesita texto para explicar prĆ”cticamente nada.

Me gustarĆ­a aƱadir al tercer autor de esta obra: el colorista Romulo Fajardo JR y algunas pĆ”ginas de John Rauch. Si tuviera que definir el arte coloreando, serĆ­a en mayĆŗsculas, ESPECTACULAR, que es lo que requiere un buen cĆ³mic americano y que descubrĆ­ en la serie Tierra 2: Sociedad (junto a Jorge JimĆ©nez o Bruno Redondo) y RĆ³mulo Fajardo jr. (Wonder Woman Rebirth), repartiĆ©ndose las pĆ”ginas magistralmente.



Nos encontramos con una historia en la que el amor homosexual es la parte que mĆ”s se suele destacar, ya que pocos hĆ©roes salen del armario. ExtraƱo es el primer hĆ©roe de DC abiertamente gay. Con nombre espaƱol, Steve Englehart y Joe Staton presentaron un afeminado peruano que era un mago e hizo su apariciĆ³n en el aƱo 1988. No es el caso de los hĆ©roes que nos ocupan y que me lleva a otra reivindicaciĆ³n: cada cual con su vida amorosa que haga lo que le plazca.

Vista la parte en la que todos se fijan, vayamos a la trastienda. Como decĆ­a al principio, Midnighter se comparĆ³ con Batman y Apolo lo hizo con Superman (fuerza sobrehumana, vuelo y que sus poderes dependan del sol), asĆ­ que nuevamente caemos en el fenĆ³meno fan que junta a superhĆ©roes en relaciones homosexuales imposibles (o no…). En el caso de nuestra pareja protagonista, sĆ³lo han tenido una disputa fuerte: Human on The Inside donde un cabreado Apolo arreĆ³ un guantazo a Midnighter por celos, haciendo que Ć©ste atravesara varias paredes.

Dejamos el tema central y vamos al argumento. Midnighter desciende al mismĆ­simo infierno por su amado Apolo. Creo que no hace falta decir nada mĆ”s, no hay que explicar ni el por quĆ©, ni plantear dudas, ya que es esa prueba de amor romĆ”ntico que aparece en cualquier relaciĆ³n (de otras maneras menos crueles, claro) y que afianza los sentimientos cuando se supera o, por lo menos, se intenta.
No demos mĆ”s rodeos. Tiene amor y acciĆ³n, narrados por un fiera brava que os harĆ” disfrutar de todo; viƱetas y encuadres imposibles y un color tan espectacular como el cĆ³mic americano nos tiene acostumbrados. ¿Alguna razĆ³n mĆ”s para haceros con Ć©l?